A pesar de haber pasado ya unas cuantas semanas, mi cerebro no es capaz de ordenar de forma coherente qué es lo que pasó exactamente aquel día.
Como ya os comenté, cambié de trabajo, pero eso no me impide (aún a día de hoy) el encontrarme con antiguos compañeros casi a diario (algo que puede resultar una auténtica pesadilla). Esto también me ocurre con mi ex-jefe. Debido a que me tuvo que echar por la situación económica, blah´blah, no le guardo rencor y le saludo como a uno más.
Cuando estaba trabajando para él ya le pillé en más de una ocasión oteándome el escote y las piernas y yo, a pesar de todo, le deleitaba a posta la vista ya que sé que en su casita como no sea a pajotes, de sexo nada, ya que su mujer no está muy por la labor.
Ya lo he dicho antes, y no sé como me crucé con él por la calle y, en una esquina, acabé aceptando dinero por dejarme follar por él. No os voy a decir cuánto dinero fue. Mas que lo que me dieron al darme la "patada" sí que fue. Recuerdo que al principio estaba disgustada, pero cuando la cantidad fue subiendo hasta desorbitarme los ojos, terminé por aceptar. ¿Hice mal?
Casi me dobla la edad y no está mal, además, lo hicimos siempre a mi modo, así que me la metió dónde y cómo yo se lo decía. Pobre, se me fue enseguida, pero no me importó hacerlo de nuevo con una magnífica mamadita y corrida sobre mis pechos después de dejarle metérmela un instante a pelo para que mis fluidos la bañaran (es un pequeño vicio heredado de mi ex).
¿Que si me gustaría repetir? Pues sí, por que la crisis desapareció de mi vida (aunque comienza a reaparecer).
Como ya os comenté, cambié de trabajo, pero eso no me impide (aún a día de hoy) el encontrarme con antiguos compañeros casi a diario (algo que puede resultar una auténtica pesadilla). Esto también me ocurre con mi ex-jefe. Debido a que me tuvo que echar por la situación económica, blah´blah, no le guardo rencor y le saludo como a uno más.
Cuando estaba trabajando para él ya le pillé en más de una ocasión oteándome el escote y las piernas y yo, a pesar de todo, le deleitaba a posta la vista ya que sé que en su casita como no sea a pajotes, de sexo nada, ya que su mujer no está muy por la labor.
Ya lo he dicho antes, y no sé como me crucé con él por la calle y, en una esquina, acabé aceptando dinero por dejarme follar por él. No os voy a decir cuánto dinero fue. Mas que lo que me dieron al darme la "patada" sí que fue. Recuerdo que al principio estaba disgustada, pero cuando la cantidad fue subiendo hasta desorbitarme los ojos, terminé por aceptar. ¿Hice mal?
Casi me dobla la edad y no está mal, además, lo hicimos siempre a mi modo, así que me la metió dónde y cómo yo se lo decía. Pobre, se me fue enseguida, pero no me importó hacerlo de nuevo con una magnífica mamadita y corrida sobre mis pechos después de dejarle metérmela un instante a pelo para que mis fluidos la bañaran (es un pequeño vicio heredado de mi ex).
¿Que si me gustaría repetir? Pues sí, por que la crisis desapareció de mi vida (aunque comienza a reaparecer).